Si esta energía esta baja, eso causa que estamos más susceptibles a enfermarnos o estar estresados. Si esta energía esta alta, tenemos más capacidad de estar sanos y felices.
Cuando por motivos, internos o externos, se
impide que el KI fluya correctamente aparecen bloqueos y trastornos que hacen
que la persona enferme; así, cualquier enfermedad es un bloqueo del flujo
correcto del KI y un correctivo de nuestra alma que nos ayuda a encontrar
errores, a impedir más equivocaciones en nuestra vida y así, llevarnos de nuevo
al camino de la paz y la verdad.
Con Reiki, no intentamos disipar la energía
enferma, sino que elevamos la vibración de esta, transmutándola en la energía
buena. Aprendemos con Conocimiento y ya no con sufrimiento. El Reiki a veces
nos puede sanar y otras nos ayuda a comprender la causa de nuestra enfermedad o
desequilibrio.